De sus orígenes de clase media a ser el tenista mejor pagado, según Forbes, por 17º año consecutivo, Roger Federer se convirtió en el número uno no solo en el tenis, sino también en lo que se refiere a la cuestión crematística, atesorando una fortuna que desborda cualquier cifra imaginable.
Durante sus 24 años en activo y más de 1.250 partidos, Federer se ha embolsado, según los datos de la ATP, 130.594.339 dólares. Una cifra que lo ubicó el año pasado en la exclusiva lista de deportistas que han generado más de 1.000 millones de dólares en toda su carrera, junto con los futbolistas Cristiano Ronaldo y Leo Messi, el jugador de baloncesto LeBron James, el golfista Tiger Woods y el boxeador Floyd Mayweather.
Sin embargo, haber conseguido más de 1.000 millones es fruto, en su mayoría, de sus estratégicos contratos publicitarios. “Estratégicos”, si tomamos en consideración algunas decisiones asombrosas que ha tomado Roger Federer: en 2018 abandonó la marca que le había vestido desde siempre, Nike, de la cual había llegado a recibir 150 millones de dólares, por un contrato de casi 280 millones de dólares con Uniqlo.
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La costosa imagen de Roger Federer
El rostro del tenista ha sido retribuido por muchas otras empresas que le otorgan cuantiosos beneficios anuales y que forman parte de la riqueza que acumula Roger Federer en la actualidad. El deportista recibe 8 millones por parte de la marca de relojes suiza Rolex, la compañía cafetera Barilla, y el champán Moët & Chandon.
Por otro lado, 7 millones recibe de la empresa de telecomunicaciones Sunrise; 6 millones de la empresa de aviación NetJets; 5 millones y un coche nuevo cada seis meses por parte de Mercedes-Benz; 4 millones al año por parte de la compañía de chocolates Lindt; y unos cuantos millones más gracias a su acuerdo con el banco Credit Suisse. Por su parte, Wilson le reporta solo 350.000 dólares, pero a ello hay que sumar que le provee de todas las raquetas y pelotas de las que el jugador hace uso.
Las ostentosas empresas y propiedades en las que el jugador ha invertido
Un actor esencial de su riqueza son las empresas en las que el tenista ha invertido: la marca suiza de calzado On, de la que también es imagen; y Team 8, de la que es cofundador y que compite, entre otras, con la Kosmos de Gerard Piqué.
Sin embargo, la larga lista de inversiones Roger Federer no termina allí, puesto que no podemos dejar de sumar sus propiedades inmobiliarias. En el diario El País, enumeraron a la perfección los bienes del deportista, quien posee «un apartamento en el piso 50 de un lujoso edificio de Dubái, una casa de montaña en el pueblo suizo de Valbella-Lenzerheide y otra en Herrliberg, un municipio próximo a la ciudad de Zúrich».
A ello también hay que agregar la más ostentosa propiedad que posee Federer: una espectacular casa de cristal en Wollerau, en el cantón de Schwyz, a orillas del gran lago Zúrich.