Rocío Carrasco había sido muy contundente al momento de presentar ‘En el nombre de Rocío’ y dejó en claro que diría la verdad y nombraría a quienes le habían hecho daño a ella y a su madre, Rocío Jurado. En el capítulo ‘En el nombre de Pedro’, la colaboradora de ‘Sálvame’ ha apuntado contra Antonio David Flores al recordar los abucheos en la tumba de Pedro Carrasco.
En la cuarta entrega de ‘En el nombre de Rocío’, Rocío Carrasco cuenta el dolor que le causa visitar la tumba de su padre y la falta de respeto que vivió aquel 27 de enero de 2001, el día más triste de su vida. Los abucheos que recibió en la entrada del tanatorio donde descansan los restos del exboxeador están grabados en la mente de la mediática.
Debido al estado de shock, los recuerdos no son nítidos, pero si recuerda ese gesto lleno de dolor y odio para ella y su familia. “Me parece una situación dantesca y vergonzosa”. Y no ha quedado allí, sino que ha señalado a Antonio David Flores como el culpable de esos hechos.
“Esas personas estaban allí porque se encargó de poner a cuatro o cinco alborotadores para que hiciesen ese jaleo y llevaran a la gente a reaccionar de esa manera”, asegura Rocío Carrasco. Una secuencia que se repite, como ya había pasado, con Rocío Jurado, Rosa Benito y Amador Mohedano. Ella está segura que el responsable es el padre de sus hijos.
Con el dolor reflejado en los ojos, Rocío está segura que el único responsable de esta situación fue Antonio David Flores. “Yo no me creía que se había ido mi padre. No me hablase con él, hablase con él, hablase con él lo que tuviera que hablar, cometiera los errores que cometiera, era mi padre y yo en ese momento no era consciente, no quería creerme que había sucedido, en este momento si me preguntas cosas concretas no te las voy a saber contestar porque no las tengo interiorizadas. Creo que mi mente las ha desplazado hacia un sitio remoto. He visto imágenes, sé que a mí se me abuchea”.
Rocío Carrasco, contra Raquel Mosquera una vez más
Rocío también habló sobre su encuentro con Raquel Mosquera luego del fallecimiento de su padre y desmiente haber estado en la casa del Paseo de La Habana para recoger las pertenecías de Pedro Carrasco. “No, no fui a esa casa después de su muerte”.
Tras ver las imágenes de la lápida de su padre, los ojos se le han llenado de lágrimas. La tumba reza: “Aquí yace el gran boxeador Pedro Juan Carrasco García. Amarte fue muy fácil. Olvidarte será imposible. Tu esposa y familia no te olvidan”.
Con esto, Rocío Carrasco lanza un dardo a Raquel Mosquera. “Esa inscripción la pone ella sin decirme absolutamente nada y sin tener el más mínimo respeto por los que están dentro de esa lápida. Ahí también están enterrados mis abuelos”. Y asegura que, con consentimiento de sus tíos, sobrinos y familia, cambiará la inscripción.
“Me duele tanto esa inscripción que la voy a cambiar y lo voy a hacer con el consentimiento de mis tíos, sobrinos y familia. Esa sí es su familia. Ese panteón hoy por hoy es mío. Ahí están mis abuelos y mi padre y ahí no va a estar nadie que no se llame Carrasco de apellido”.
