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Concha Velasco atraviesa su momento más delicado y pone en alerta a Manuel Velasco

Concha Velasco.

Atrás han quedado los años dorados de Concha Velasco. La icónica actriz, quien se ha despedido de sus amados escenarios el pasado septiembre, atraviesa un momento de vulnerabilidad total causado, en parte, por sus problemas de movilidad derivados de la artrosis que padece. Mientras pasa sus días en la residencia de ancianos donde vive desde febrero, su salud se complica cada día más, generando una gran angustia en su hijo, Manuel Velasco.

El traslado de la «Chica Ye-Ye» a una residencia generó un gran debate en los primeros meses del año. Muchos consideraron que los hijos de Concha Velasco estaban actuando de forma desconsiderada para con ella, y recibieron una ola de críticas. Manuel Velasco, muy angustiado por la situación, tuvo que oficializar como portavoz de la familia y explicar los motivos de la mudanza.

Al estar tan delicada de salud, Concha necesita el cuidado profesional de médicos, enfermeros y asistentes las 24 horas del día, y en estas residencias la artista recibe la mejor atención personalizada. «Estoy muy contenta y bien atendida. Me gustaría que se contara la verdad, y la verdad es que estoy muy bien», decía la actriz hace cinco meses, avasallada por las críticas que recibían sus hijos.

Los últimos detalles de su estado de salud

A pesar de los cuidados que recibe constantemente, las personas que la visitan a diario aseguran que Concha no evoluciona ni presenta una mínima mejoría. Así lo desvela el diario “La Razón”, quienes se han puesto en contacto con los allegados más íntimos de la artista.

Desde el círculo íntimo de Concha Velasco han confirmado que la artista intenta mantenerse animada y le pone la mejor actitud a este momento delicado. Incluso no se desprende de su teléfono, a través del cual habla con sus amigos e invita a sus colegas del medio a la residencia para compartir viejas anécdotas.

Compañía no le falta, dado que su carisma y buena energía la llevaron a hacer íntima amiga de sus compañeros de piso. De todas formas, sus hijos Manuel Velasco y Paco Velasco la visitan semanalmente, sin falta. Ellos la apoyan y respetan como nadie, por eso siempre que su agenda se lo permite se acercan a la residencia para pasar momentos de calidad con su madre. Al fin y al cabo, Concha Velasco se lo merece.

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