La dura historia de vida de Gerardo Berodia, el exfutbolista que conquistó a Almudena Cid

El deportista nunca se rindió ante los malos momentos.

Gerardo Berodia
Gerardo Berodia

Almudena Cid está recuperando su corazón del dolor que le causó su ruptura con Christian Galvéz. El presentador y la gimnasta fueron pareja durante once años, por lo cual, fue difícil para ella dejar todo atrás. Los rumores indicaban que hubo una infidelidad de por medio e incluso la madre de la deportista apuntó furiosa por eso contra quien fue su yerno durante tanto tiempo. Ahora, todo indica que es Gerardo Berodia quien la ayuda a pasar la página.

Tras sus ocho meses de soltería, Almudena Cid fue fotografiada por la revista Semana en una escapada romántica con el exfutbolista, Gerardo Berodia. El lugar elegido por la nueva pareja fue nada más ni nada menos que Galicia. A través de su cuenta oficial de Instagram, la exgimnasta dejó ver algunos de los rincones que visitaron. Muchos de ellos llenos de naturaleza.

Si bien el romance entre estas dos personalidades tuvo inicio ahora, tras las diversas cuestiones que les ha tocado pasar en su vida, lo cierto es que se conocen desde 2017. Incluso se han fotografiado juntos con grupos de amigos en común. ¿Qué los motivó para darse una oportunidad lejos de un vínculo amistoso?

La complicada historia de vida de Gerardo Berodia

Sus inicios en el fútbol se dieron cuando era tan solo un niño. Incluso, conoce a Iker Casillas desde que tenía tan solo 19 años. Su padre los llevaba juntos a los entrenamientos. En ciertas entrevistas, Gerardo admite que desde ese momento sabía que su colega era un distinto para el mundo del deporte. Cuando tenía tan solo 15 años, le diagnosticaron cáncer. Tenía un tumor en el tobillo.

Por lo cual, pasó varios años de su vida en medio de operaciones, rehabilitación y médicos. En un primer momento, los doctores fueron contundentes con él en un comienzo, pero afortunadamente encontró un tratamiento menos invasivo que le dio una nueva posibilidad con el fútbol a sus 18 años. Cabe mencionar que antes de su diagnóstico, cuando era pequeño le tocó protagonizar también algunas lesiones.

«Mi padre me dijo que tenía que elegir entre la amputación del pie o quitar el hueso entero y fijar la tibia con el tobillo. En ese momento uno no piensa en el fútbol sino en salvar su vida», indicó. Si bien tuvo oportunidades de integrar varios equipos y nunca abandonó del todo su pasión, tuvo que ejercer otras profesiones debido a algunas necesidades económicas. Por ejemplo, trabajó como taxista durante cierto tiempo.